Julio Magdalena tiene 47 años. Nació en Teruel, pero desde los 12 que vive en Cataluña. Concretamente entre Valls y Cambrils. Estudió Marina Mercante, lo que sorprendió a su familia, de tradición farmacéutica y médica. Julio desde pequeño soñaba con el mar, con viajar y con aventuras embarcado. Se dedica a la enseñanza náutica desde que terminó la carrera.

Antes de entrar a la Academia Náutica del Club Nàutic Cambrils trabajaba en la Unidad de Tecnología Marina del CSIC, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Lleva al frente de la Academia Náutica del Club Nàutic Cambrils desde abril de 2016.

¿Por qué dijiste que sí a la propuesta del Club Nàutic Cambrils?

Estaba harto de subir y bajar a Barcelona todos los días, aparte de que el trabajo me exigía ir a la Antártida una vez al año 4 o 5 meses y ya llevaba 7 años yendo, y dejar a la familia, entre otras cosas, comenzó a pesar demasiado. Antes estaba de profesor en la Escuela de Capacitación Náutico Pesquera de la Ametlla de Mar y me lo ofrecieron. Acepté “por 2 años para conocer la Antártida y lo dejo” y en cambio ha sido una experiencia que se ha alargado 7 años. Además en Barcelona también trabajaba en una Academia y me levantaba a las 5 de la mañana y volvía a las 10 de la noche en casa, con los fines de semana incluidos y eso no era vida.

Te ofrecieron venir aquí. ¿Te lo pensaste mucho?

No. En ese momento fue atrayente, al lado de casa, un proyecto que estaba bien, mi mujer es de Cambrils, estábamos encantados. Este año llevo a mi hija al colegio cada día y le doy de comer, algo que no había hecho nunca porque no podía. Estoy encantado.

¿Cómo te encontraste la Academia?

Con un proyecto sin finalizar. No había habido una dirección. Más o menos se habían ido haciendo las cosas como se podía pero era un proyecto por el que no se había apostado, no había habido tiempo. Había que definirlo como un proyecto de larga duración.

¿Qué has hecho para cambiar la situación?

Primero de todo consolidarlo. Que funcione, que sea viable, atendiendo a la demanda de los alumnos, que se les pueda ofrecer lo que quieren y que tengan un amplio abanico de posibilidades para que la gente pueda navegar. Y que sea una oferta que esté todo el año.

Entraste en abril de 2016 y enganchaste el verano, la mejor época en cuanto a volumen. ¿Ha descendido mucho desde su finalización?

Pensaba que prácticamente no haríamos nada desde finales de verano y en cambio se ha trabajado mucho. Y es que si tienes el calendario montado, distribuyéndolo hasta finales de año, la gente se puede planificar mejor y lo agradece. Si lo tienes en el calendario, la gente responde. Ayuda mucho.

¿Cuál es el curso estrella?

Sin lugar a dudas los dos cursos estrella son el PEE (Patrón de Embarcaciones de Recreo) y la Licencia de Navegación. De licencias hemos hecho muchas. Y yo tenía mis dudas porque decía que eliminarían PNBs y PEE y no, al contrario. Hacen que mucha gente que quiera acceder a la náutica, acceda, aficione y se siga quitándose títulos de más nivel. La licencia es un trampolín para empezar a engancharse a la náutica.

¿Qué se ofrece en la Academia Náutica del Club Nàutic Cambrils?

Todos los títulos. Y ahora tenemos entre manos el proyecto de poder ofrecer su estudio on line y también ofrecer cursos profesionales, por los que hay cierta demanda y más teniendo en cuenta que de cara a los próximos meses, si las cosas no cambian, darán atribuciones profesionales los patrones de yate y los PEE.

¿Cuál es el perfil de alumno?

Socialmente muy variados. Evidentemente es gente de estatus económico medio alto pero no siempre necesariamente. Y curiosamente el 70% es gente de fuera, básicamente de Zaragoza y Lleida, y también de la Rioja y Madrid. El 30% restante de la provincia.

¿Por qué? ¿Qué problema tienen las otras academias?

Normalmente es gente que tiene casa aquí y le es muy cómodo venir el fin de semana y sacarse el título. En cuanto a la teoría, lo que triunfan son los intensivos de fin de semana por la misma razón.

Y luego, a ver, tenemos precios realmente económicos. Ahora por ejemplo tenemos un grupo de Cadaqués para hacer la licencia. ¡Fíjate, si de aquí a Cadaqués hay academias por toda la costa!

¿Y sobre la edad de los alumnos?

Muy variada también. De 30 a 50 la mayoría.

 ¿Por qué invitarías a elegir nuestra Academia y no otra?

Aparte de una Academia que sirve para sacarse títulos náuticos, por todo lo que ofrece el Club, su sinergia. Todas las posibilidades de Club, tanto sociales como deportivas y su entorno. Aparte que lo hacemos muy bien (risas).

¿Cuáles son los objetivos a partir de ahora?

Nos gustaría modernizar la flota, implantar títulos profesionales, ofrecer cursos on line y empezaremos con el Club de Navegación y cursos monográficos, como por ejemplo supervivencia en el mar o seguridad marítima.

También está en marcha el proyecto de la web. ¿Qué beneficios tendrá tener una web propia?

Sobre todo la comunicación. Hoy en día si no te conocen no estás en ningún sitio. Y más viendo que la mayoría de nuestros alumnos son gente de fuera. Entonces es importante que se puedan conocer nuestros cursos y precios, además de otros servicios paralelos, como recogida o alojamiento.

En un futuro queremos aumentar el mercado en el extranjero para que todos puedan disfrutar de nuestro clima en cualquier época del año porque realmente se puede navegar todo el año aquí. Del mismo modo que vienen a jugar al golf para disfrutar del clima, se les puede ofrecer la posibilidad de navegar y de conocer Cambrils.

¿Qué valoración haces de tu año en el frente de la Academia Náutica del Club Nàutic Cambrils?

Estoy contento. La gente ha respondido muy bien y los meses de invierno que creía que el trabajo bajaría, no ha sido así. Estamos contentos en todos los sentidos. Ha funcionado bien la Academia y pienso que ya es algo consolidado dentro del Club, que era desconocida por muchos socios pero que ahora es una de las alas del Club.