Alfredo Clúa nació en Monzón, Huesca, hace 55 años, pero a los nueve meses su familia se trasladó a vivir al barrio de La Granja, en Tarragona. En 2000 él se mudó a Cambrils, de donde es el alcalde desde el pasado mes de julio. Cree que la náutica es esencial en el municipio de Cambrils y para Cambrils.

¿Cómo fue su primer contacto con Cambrils?

Mis padres tenían un chalet en Mont-Roig y bajábamos mucho a Cambrils. Y con los amigos nos movíamos por aquí. Más adelante trabajé en un bar del puerto dos veranos. Me gustaba mucho y en el 2000 nos mudamos.

¿Qué estudió?

Hice ingeniería técnica de máquinas eléctricas especialidad electrónica y más tarde un máster de dirección y organizaciones.

¿Por qué se interesó por la política?

Mi abuelo era sindicalista, mi hermano también empezó como sindicalista y en paralelo entró en el partido socialista. A los 18 años ya me interesé por la política. En 1997, cuando empiezo a trabajar, es cuando empiezo a bautizarme como sindicalista y entro en el comité de empresa.

¿Por quién no lo sepa, a qué se ha dedicado?

Desde que terminé la ingeniería, siempre he trabajado en el sector industrial. En 1995 empecé en un taller mecánico y en 1997 en una multinacional de la industria química como operario, para subir a responsable de mantenimiento, parada, proyectos y mantenimiento. Han sido 26 años como ingeniero.

Este verano cumplirá un año alcalde de Cambrils. ¿Qué valoración hace?

Superpositiva. Porque todos los obstáculos que han ido saliendo los hemos podido gestionar satisfactoriamente y porque los primeros pasos que estamos dando en otros temas, están por el buen camino. No estoy haciendo nada diferente a lo que hacía en mi antiguo trabajo, porque son varias reuniones diarias, tomar muchas decisiones, intentar equivocarme poco y hacer que el engranaje y las personas funcionen.

¿Se esperaba así el cargo?

Sí, porque conozco al consistorio desde 2013, cuando entré en la oposición hasta 2015, que entramos a gobernar y yo era concejal de Deportes, Bienestar Social, Salud y Derechos Cívicos. El cargo de alcalde no me ha sorprendido más que por el gran volumen de reuniones diarias.

Hace 10 años que conoce al Ayuntamiento desde dentro. ¿Ha cambiado mucho en esta década?

Al contrario. Ha cambiado demasiado poco. Cuando entré en 2013 me di cuenta de que el Ayuntamiento necesitaba una mano de modernidad. Se necesitan cambios profundos en la gestión interna, sobre todo. Y se harán.

¿Cómo valora relación con el Club Nàutic Cambrils?

Yo siempre digo que le tengo un respeto especial porque es la mayor infraestructura de la ciudad y un motor económico. Siempre he pensado que los políticos debemos estar para intentar hacer las cosas fáciles a las entidades y asociaciones del municipio. He hablado mucho con el presidente del Club Nàutic Cambrils para saber qué mejorar y sus inquietudes, y respetarlas.

¿Qué le pide al CNCB?

Le pido apertura con las entidades locales y deportivas. Que no quiero decir que no la tenga. Y que siga siendo un dinamizador de la economía cambrilense.

Una reivindicación del Club Nàutic Cambrils son las esloras de hasta 45 metros. ¿Cree que serán una realidad este 2024?

Yo por mí, espero que se haga. Si no de 45 metros, de 40. La voluntad del Ayuntamiento es que se haga sin perjudicar a nadie. Todos debemos estar cómodos. Tenemos una infraestructura, la mayor de Cambrils. Tenemos un propietario que es Ports de la Generalitat. Tenemos un gestor que es el Club Nàutic y unos usuarios, que son el Club Nàutic y la Cofradía de Pescadores. Estamos obligados a ayudar al sector primario en la medida de lo posible y facilitarles el día a día. A partir de ahí cada uno debe ser responsable con sus decisiones.

¿Cree que sería bueno para el municipio acoger esloras mayores?

¿Por qué no? ¿Qué hay de negativo? Es más gente, mayores ingresos, más economía. Es sostenible. Lo que debemos ver es que no haya puntos en contra.

¿Ya se ha sacado la licencia de navegación?

La tengo pendiente (ríe). Pero la hago un día de éstos. Son sólo seis horas, ¿verdad? Quiero hacerla. Situación: pendiente con vistas a solucionarse rápido.

¿Cuál es su relación con el mar?

Poca. Una de mis pasiones frustradas es la marina. Pero he estado en una planta química. He intentado matricularme en un posgrado en marina, pero todos son presenciales en Barcelona y ahora mismo me resulta muy complicado.

¿Y por ocio ha navegado?

Muy poco.

¿Cree que los niños y niñas de Cambrils deberían hacer vela?

Yo no entiendo porqué no hay una asignatura de vela en las escuelas de Cambrils, teniendo el mar a nuestros pies. No sé porqué hay tanta distancia entre la educación infantil y primaria y la vela. Debería ser más fácil. Por lo menos los niños y niñas tendrían poder de decisión en el futuro para saber si les gusta o no la vela, porque ahora no lo tienen.